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Rocas metamórficas: tipos, ejemplos y formación

Rocas metamórficas, formación y tipos
Rocas metamórficas
Beatrice Murch/CC BY 2.0

Definición de rocas metamórficas

Las rocas metamórficas se forman como resultado de la transformación al interior de la corteza terrestre de una roca ya formada, consecuencia de cambios intensos de temperatura, presión o la interacción con fluidos químicamente activos.

Los procesos metamórficos o metamorfismo pueden afectar a cualquier roca que se encuentre en el interior de la tierra, y producen cambios mineralógicos y texturales en estado sólido que consisten en: la blastesis que es la nucleación y crecimiento de los nuevos minerales, los cambios de composición que incluyen la recristalización y/o descomposición de las rocas preexistentes y los cambios estructurales.

Las rocas metamórficas representan cerca del 27% de las rocas que se encuentran en la tierra.

Agentes del metamorfismo

Son los agentes que intervienen en la formación de las rocas metamórficas.

Temperatura

Es el agente más relevante en la formación de las rocas metamórficas, en términos generales por cada kilómetro que aumenta la profundidad en la corteza terrestre se aumenta 33°C, este promedio disminuye en las fosas oceánicas y aumenta en las dorsales.

Las cámaras magmáticas también son fuentes de calor, aunque su aureola térmica es de pocos kilómetros, porque la roca es mala conductora de calor; este metamorfismo térmico puede producir el crecimiento de cristales proceso denominado recristalización.

Presión

Es resultado del peso ejercido por las rocas o el desplazamiento de los rocas unas sobre otras. Estas grandes presiones fracturan las rocas y la fricción produce que la roca se funda parcialmente, produciendo que los minerales de desintegren y recristalicen.

La presión real a la que está sometida una roca depende también de la presión de los fluidos que se encuentran en sus poros, son necesarias presiones de entre 2800 y 4200 atmósferas para que la roca fluya plásticamente, estas presiones se logran a profundidades de entre 9 y 12 kilómetros. Este flujo plástico produce un movimiento intergranular, pérdida de fluidos, reorientación de los granos de mineral, aumento cristalino y cambios de textura en las rocas.

Fluidos químicamente activos

Durante el enfriamiento del magma se producen soluciones hidrotermales líquidas o gaseosas, estas soluciones se percolan en las rocas, y reaccionan con estas produciendo la precipitación de los minerales disueltos, este intercambio iónico produce fenómenos como la recristalización, la neo cristalización y el metasomatismo. El último fenómeno mencionado se relaciona con yacimientos de minerales metálicos.

Tipos de metamorfismo

Existen diferentes tipos de metamorfismos o cambios experimentados en la rocas hasta constituirse en rocas metamórficas.

Metamorfismo regional

El metamorfismo regional se produce al formarse las cordilleras a partir de colisiones continentales, estas colisiones conllevan la formación de plegamientos en la corteza terrestre, se trata de fenómenos que hacen que las rocas se vean sometidas a altas temperaturas y presiones en la dirección del movimiento, lo que produce la aparición de rocas metamórficas en dirección paralela al movimiento. Las rocas producto de este proceso se denominan esquistos.

Metamorfismo de contacto

Este es debido al calentamiento de las rocas adyacentes a los lugares por donde pasa al magma para salir a la superficie, es un proceso es de alta temperatura y baja presión. Las rocas formadas por el metamorfismo de contacto son las corneanas y esquistos meteados.

Metamorfismo progradante

Es el metamorfismo que se produce al verse afectada una zona por un aumento progresivo de presión y temperatura, las áreas vecinas se perturban de forma que la zona de metamorfismo se expande de forma radial a partir del punto inicial. Esta zona metamórfica es más intensa en el centro del domo y se va haciendo más tenue a medida que se aleja a la periferia.

Retrometamorfismo

Se produce cuando rocas formadas descienden a zonas con mayor temperatura y presión, en este caso los minerales se pueden reestructurar sin que se borre completamente su mineralogía y textura previamente formadas.

Tipos de rocas metamórficas

Describimos algunos ejemplos tipos de rocas metamórficas.

Pizarra y filita

Estas rocas metamórficas se diferencian en que la primera (pizarra) es de grano más fino y la filiación es microscópica, mientras que la segunda (filita) tiene grano más grueso y la foliación se puede ver a simple vista en hojas grandes y delgadas.

Esquisto

Puede provenir de rocas ígneas o rocas metamórficas, tiene un metamorfismo mayor que las pizarras y filitas. Los más importantes son los esquistos talcosos, clorítico de hornblenda y anfibolita.

Anfibolita y serpentita

Las dos están asociadas a rocas básicas y ultrabásicas, la anfibolita es rica en hornblenda y plagioclasa y la serpentita rica en silicatos de magnesio, es una roca compacta con tacto suave y jabonoso.

Gneises

Son rocas de metamorfismo de alto grado formadas a partir de rocas ígneas y sedimentarias, por esta razón existen de muchos tipos.

Mármol

Se produce a partir de calizas y dolomías por metamorfismo regional o de contacto, su estructura es cristalina y no presenta foliación macroscópica porque todos los granos tiene el mismo color, el mármol puro es blanco nieve.

Cuarcita y hornfels

Rocas metamórficas que se forma por metamorfismo de cualquier grado en areniscas cuarzosas y arcillas calcáreas, presenta estructura granular, no porosa y no se rompe alrededor de los granos sino a través de ellos. La hornfels también se denomina cornubianita, se forma por metamorfismo de contacto.

Bibliografía

– Duque, G. (2017)
– Vallejo, C. (2014)
-Foto: Beatrice Murch


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